“Sólo en año y medio, Lorena Orduna ha pasado de asegurar que iba a ahorrar 118.000 euros en sueldos el Ayuntamiento de Huesca a intentar subirse el suyo y tener seis personas contratadas como personal de confianza, siete si se aprueba la propuesta de que el coordinador del protocolo de la institución sea también nombrado a dedo. Va a acabar siendo la alcaldesa más cara de la historia de la ciudad”.
La portavoz del Grupo Municipal Socialista en el consistorio oscense, Silvia Salazar, considera que esta decisión “aunque legítima, es poco ética y estética” y explica que “de momento, a la ciudadanía le va a costar 100.000 euros al año que Lorena Orduna tenga un chófer y una persona para protocolo. Lo peor es que no sabemos si con esto se contentará o si seguirá incrementando la nómina de personal a su servicio. Está haciendo del Ayuntamiento su cortijo personal”.
Sobre la citada contratación, el PSOE critica, además, las formas en las que se ha llevado este asunto. Belén Hernández ha calificado de “muy grave que ayer en la mesa de negociación hicieran la propuesta de contratar una persona de confianza de la alcaldesa para llevar su protocolo y lo condicionaran a la aprobación por parte de los sindicatos, y menos de media hora después, en la comisión de personal, modifican la propuesta y dan por hecho que se va a llevar a cabo. Nos engañaron para hacer una nueva contratación a dedo”.
Si finalmente se aprueba en pleno esta nueva plaza de personal eventual, “estaremos hablando de una importante cantidad de de recursos públicos sólo para la alcaldesa” ha apuntado Salazar, quien ha recordado que en la comisión de personal celebrada este lunes fue “de nuevo el voto de calidad del PP el que decidió que la tramitación siguiera adelante. El Grupo Municipal Socialista mostró su oposición a esta decisión tanto en la mesa de negociación como en la comisión de personal”.
A juicio del PSOE, “hay profesionales muy cualificados para ello dentro de la plantilla del Ayuntamiento. Nosotros defendemos que esta plaza tiene que estar cubierta por personal de la casa, como venía haciéndose hasta ahora, y no por personas contratadas a dedo. El protocolo es de la institución, y está por encima del alcalde o alcaldesa de turno”.